viernes, 31 de enero de 2014

Café doble irlandés



Los españoles amamos el café, es un hecho. Esto es cierto hasta el punto de que existe una variedad de café, el "café americano", que lleva ese nombre en español dondequiera que vayas y se trata de un café largo de agua con extra de azúcar. Una segunda variedad de café, más habitual en España, es el llamado "café doble", que vendría a ser un café con leche largo de café y de leche. Un señor café, vaya. En tercer lugar, el irish coffee es una especialidad de Irlanda, que viene a combinar lo mejor de ambos países: el "café americano" español junto con crema de leche (como el café doble), junto con whisky del país. Y, si tuviéramos que definir el "café doble irlandés", ¿qué sería? Pues una regalía, no visible a simple vista, de un chorrito extra de whisky. 

En realidad, de lo que quiero hablar en este post no es tanto sobre café, sino sobre la "regalía" fiscal que algunas compañías están dándose al practicar el llamado double irish dutch sandwich, también conocido simplemente por double irish. ¿Qué vendría a ser esta práctica? El FMI nos lo explica de esta manera:

"La multinacional X, con sede en los EEUU tiene la oportunidad de hacer negocio, p. ej., en el Reino Unido de un producto que puede proveer de forma remota. Sin embargo, el tipo impositivo de Reino Unido es bastante alto.
De esa forma que vende el producto directamente desde Irlanda a través de la empresa B, con la empresa Y proveyendo de servicios a los clientes a coste de la empresa B. Esto deja un bajo margen de beneficio a la empresa del Reino Unido.
Ahora, el problema de la multinacional es sacar el beneficio fiscal de Irlanda y mantenerlo en una jurisdicción fiscal favorable.
Para esto, lo primero es transferir la patente desde la cual el valor del servicio es transferido a la empresa H en, por ejemplo, las Islas Sandwich [sí, de ahí parte del nombre del timo], donde la tasa impositiva es cero.
De aquí surgen dos problemas. En primer lugar, que los Estados Unidos puede usar sus reglas CFC (Controlled Foreign Company) para gravar con impuestos esta transferencia de dinero. [Como la mayor parte de países, EEUU grava los beneficios en todo el mundo, no sólo en su país. Pero esto no ocurre con todos, y he aquí la trampa].
Para evitar esto, se crea una nueva compañía A en Irlanda, gestionada por la compañía H, y domiciliada en A y B para proósitos fiscales. De esta forma, si se arregla de forma correcta, Reino Unido tratará A y B como una única compañía irlandesa, no sujeta a CFC, mientras que Irlanda tratará A como domiciliada en las Sandwich, por lo que no pagará impuestos. El siguiente problema es enviar el dinero de B a H, evitando controles de capital transfronterizos. Esto se hace estableciendo una compañía conducto en Holanda. Pagos de B a S y de S a A se benefician de la ausencia de controles de capital transfronterizos dentro de la UE. Aquellas transferencias entre B y H están exentos según la ley holandesa." (la traducción es mía).
El FMI calcula que unos 2 trillones de US$ estarían alojados en ultramar usando este esquema, aunque dice que es difícil calcular cuánto correspondería en impuestos a los EEUU (o al país de origen de la multinacional en cuestión).

La siguiente pregunta que se nos plantea es ¿quién está usando este planteamiento? Pues muchos de los grandes gigantes de Internet: Google, Twitter, Facebook, Apple, Microsoft y otros. Concretamente ha sido Apple la que ha sido pillada "in fraganti" y la justicia italiana está detrás de la compañía de la manzana. Pronto serán otros.

De acuerdo con el Jefe de servicios fiscales de la firma PwC en Irlanda, Fergal O´Rourke, los días del double irish están contados. Esto está claro: la mayor parte de países del mundo contiene legislación evitando el fraude fiscal y todo este montaje, digno de timadores de película, entra fácilmente dentro de la definición de fraude de muchas legislaciones. Y aquellas en las que no entra, pronto lo hará. Nadie, y menos los países europeos hambrientos de aumentar su recaudación, va a renunciar a su parte de la tarta de los beneficios de las mayores compañías en crecimiento del mundo. Irlanda, como país rescatado, cuenta con deudas con dichos países y con compromisos que cumplir ante la Troika europea. Por esta razón no es extraño que o bien Irlanda por voluntad propia cambie su legislación, o bien reciba presión por parte de sus acreedores para hacerlo.

P.S.: Yahoo! también se pasa al double irish, y tiene la desfachatez de enviar un mail a sus usuarios vendiéndolo como una"reorganización para mejorar sus servicios". He aquí la prueba del delito:

P.S.2: la OCDE ha anunciado un plan para combatir "la erosión de la base imponible y el traslado de beneficios", tal y como describe elEconomista.es en este artículo. Las cuestiones que quedan en el aire son por una parte, si los Estados pueden llevar a cabo estas reformas fiscales habida cuenta del poder de las multinacionales a las que se enfrentan y en segundo lugar, si serán suficientes. El tiempo lo dirá.

jueves, 16 de enero de 2014

La neutralidad de Internet, al borde del abismo






Hace poco hablábamos del Compromiso Kingsbury y de la influencia que ha tenido en el desarrollo de Internet. Algo que mencioné entonces es que dicho Compromiso estaba cerca de romperse. Pues bien, ese día está ahora más cerca que nunca gracias a la la decisión del Tribunal de Apelaciones de EEUU en el caso Comisión Federal de Telecomunicaciones contra Verizon.

Este caso fue planteado porque Verizon quiere, en la práctica, desligarse del Compromiso Kingsbury y ofrecer menor velocidad de conexión a determinados sitios de Internet en función de criterios comerciales. Además, quiere poder ofrecer diferentes precios y velocidades de conexión en función de criterios de disponibilidad de servidores y redes, lo cual favorece a las grandes empresas sobre los consumidores, ya que éstas absorberán la mayor parte del tráfico circulatorio de Internet. De esa forma muchos sitios de streaming de contenidos podrían ver reducida su funcionalidad. Tampoco favorece a las start-up que no tengan acceso a nodos de red de alta velocidad en parques tecnológicos, por ejemplo. 

El Presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones, Tom Wheeler, al que podéis ver arriba en la foto, ha tomado esto como un agravio y encabeza una cruzada personal por defender la aplicación del Compromiso Kingsbury a Internet. A raíz de la sentencia ha emitido un comunicado en el cual reafirma la capacidad de la Comisión para "promulgar leyes que gobiernen el tratamiento del tráfico en Internet proporcionado por los proveedores de banda ancha".  Esta autoridad que amenaza con ejercer vendría a consistir, según un artículo de El País, en cambiar la definición de Internet para considerarlo un servicio de telecomunicaciones, atando por ley a los proveedores de Internet al Compromiso Kingsbury.

Por supuesto, Verizon también ha pataleado protestando por esto, diciendo que la FCC “no puede imponer condiciones del siglo pasado a los proveedores de acceso a Internet”. En su blog ha reafirmado su compromiso con una "Internet abierta que provea a los consumidores con elecciones competitivas y acceso sin barreras a sitios web y contenidos legales como, cuando y donde ellos quieran". Personalmente no me parece casual el hecho de que hable de una "Internet abierta" y no de una Internet neutral. "Por mucho que la mona se vista de seda, mona se queda", que dice la sabiduría popular.

sábado, 11 de enero de 2014

American Gods


American Gods es una de las más aclamadas novelas de Neil Gaiman. Fue publicada por primera vez en 2001, y la imagen que veis arriba corresponde a la edición 10º aniversario, la cual he tenido oportunidad de leer. En el año 2002 ganó los premios Hugo, Nébula, Locus y Bram Stoker, siendo la primera novela en la historia en ganar los cuatro premios el mismo año. Esto fue un poderoso incentivo para leerla, y no fue en absoluto una decepción.

Esta edición cuenta con un prólogo y un epílogo escrito por el propio Gaiman, y en castellano, con una nueva traducción a cargo de Mónica Faerna. La razón de esta nueva traducción es la inclusión en esta edición de ciertos pasajes que en la original fueron suprimidos. Esto hace que el volumen de la obra crezca, pero la lectura sigue siendo sumamente ágil. 

La novela cuenta la historia de Sombra, un hombre que está encerrado en prisión por un delito que no cometió. Diversas circunstancias harán que salga de la cárcel. Entonces intenta rehacer su vida, pero el destino lo llevará a conocer a un hombre llamado Wednesday, que le ofrecerá un extraño empleo, el cual terminará aceptando. Este empleo lo llevará por lo largo y ancho de los EEUU, implicando cada vez más en una conspiración que adquiere tintes crecientemente inverosímiles: el retorno de los viejos dioses en una nueva tierra, los Estados Unidos. 

No se puede decir que esta novela pertenezca a un género en particular, y por ese motivo ha recibido galardones reservados para diferentes géneros. El libro viene contando sobre las tradiciones de aquellos emigrantes que viajaron a EEUU desde otras partes del mundo. Siendo el propio Gaiman de origen británico, la obra tiene un matiz personal muy especial. 

En cuanto a los personajes, el elenco es muy variado, pero destacan los siguientes:
-Sombra: se trata de un hombre con un pasado un tanto borroso. Cometió errores en el pasado que lo condujeron a prisión. Su máxima intención es redimirse y volver a vivir con su esposa Laura, de la que está locamente enamorado. Sin embargo, las cosas con Laura se complicarán. Se trata de un hombre de gran poder físico, no especialmente inteligente ni culto, aunque lo suficiente como para no verse engañado con facilidad. Es bonachón, y muy pacífico. Detesta el uso de la violencia, y la evita en la medida de lo posible.
-Wednesday: el misterioso empleador de Sombra es un timador profesional, que sin embargo cuenta con grandes ideales. Ha puesto en marcha una cruzada para reunir a los antiguos dioses en una causa común, y contrata a Sombra para ser su mano derecha.
-Laura: la esposa de Sombra aparece de cuando en cuando en la novela, para sacar las castañas del fuego a Sombra cuando éste se mete en líos. Al contrario que Sombra, Laura tiene una moral laxa que no le impide el uso de la violencia si es necesario para cumplir sus fines. 
-El Hombre Búfalo: este misterioso personaje se aparece en los sueños de Sombra, y lo guía en su camino hacia la "iluminación", por así decirlo. Se trata de una suerte de mentor espiritual, reflejo en parte de la propia personalidad de Sombra. 

Podría mencionar a muchos más, pero estos cuatro son los fundamentales en la novela. 

En cuanto a los temas tratados, el tema principal es la cultura americana. Se habla tanto de las raíces de la misma a través de las tradiciones del pueblo americano formado con los emigrantes llegados de otros países, como de la cultura popular de nuestros días, de cómo los americanos actúan, creen y piensan a día de hoy. Se trata de un viaje por los EEUU más profundos, y más conocidos. Por su más pura esencia. Otro tema fundamental en la novela es el autodescubrimiento. El viaje de Sombra es un viaje de iluminación, casi religioso, en pos de descubrir su propia esencia, su origen y el camino que quiere adoptar en su vida. El tercer tema fundamental que trata la obra es el amor. Sombra y Laura mantienen una relación que va del amor al odio según momentos. Ambos buscan perdonarse, pero la vida de ambos ha cambiado tanto, y ambos ya no son los mismos, que encuentran grandes dificultades. Asimismo, también se presenta la relación de Sombra con otras mujeres, como Zorya Poluchnaya, y Samantha Cuervo Negro, que dotarán de sentido y dirigirán a ratos la senda de Sombra hacia su destino.

En resumen, un muy buen libro que recomiendo encarecidamente a cualquiera: tanto los fans del terror, como los fans de las novelas policíacas, o de las novelas románticas van a encontrar en este libro una deliciosa lectura.

sábado, 4 de enero de 2014

El mundo que no fue: El 2014 que no fue según Julio Verne, H.G. Wells e Isaac Asimov



Empieza 2014, y me gustaría comenzar con un tema al hilo del artículo publicado hace unos días en FayerWayer, "2014 según Asimov". En este artículo se analiza la visión de 2014 que Isaac Asimov ofreció en una columna del New York Times a propósito de la Feria Mundial celebrada por la misma ciudad deNueva York en 1964. Sin embargo, en este artículo quiero ir un poco más allá, y analizar cuál es el 2014 que imaginaron otros autores de ciencia ficción. Iré en orden cronológico, empezando por Julio Verne, siguiendo por H.G. Wells, y terminando por el propio Asimov.

Empezando por Julio Verne, cabe señalar en primer lugar que sus predicciones no se referían, en realidad, tan lejos como 2014; sino que el manuscrito "París en el siglo XX" relata la visión del escritor de París en 1963. Esto es, cien años después de la fecha de su redacción, aunque nunca llegaría a publicarse hasta 1989. En esa fecha se descubrió el manuscrito. Al contrario que otros escritos de Verne, su optimismo por un mundo tecnológico se ve contrariado en esta novela. Nos muestra un mundo deshumanizado en el que los europeos utilizan masivamente "coches sin caballos que funcionan a gas" (¿automóviles?), "máquinas similares a un piano que hacen operaciones matemáticas con una simple tecla" (¿computadoras?), y en el que el telégrafo ha sido reemplazado por "cables que envían la información a los hogares en imágenes y texto" (¿Internet?). Por suerte, Verne pecó de pesimista, y su visión de una cena familiar en la que nadie habla como algo normal es todavía una anomalía en nuestra sociedad.

Herbert George Wells, conocido por las siglas de su nombre, "H.G.", fue otro gran visionario del futuro. Al igual que Verne (en "Ante la bandera"), acertó con el peligro de las armas de destrucción masiva, aunque con mucho más tino al prever en su libro "The world set free", publicado hace justo cien años, el desarrollo de las armas nucleares y el peligro de su proliferación. También predijo el viaje espacial, como es bien conocido. Otro de sus aciertos es la invisibilidad, reciente desarrollada por el ejército de los EEUU. Por suerte para nosotros, también pecó de pesimista al predecir guerras interplanetarias que parecen inimaginables hoy en día. Tampoco acertó con el viajes en el tiempo, aunque el científico Stephen Hawking ya ha desarrollado los principios teóricos del mismo.

Finalmente quiero detenerme un poco más en las predicciones de Asimov, no sólo por ser las más cercanas, si no por ser específicas para la fecha actual. Para Asimov, en 2014 los humanos vivirían en casas subterráneas con luz y temperatura controladas. Me temo que erró el tiro, ya que seguimos con los pies sobre la tierra. No falló tanto al augurar "cocinas que harán autocomidas" semipreparadas. Bien, aunque dista bastante de la visión de Asimov, más o menos es lo que hacen los robots de cocina, ¿no? Por desgracia, todavía no pueden programarse para que tengan la comida hecha para una hora determinada, pero con la revolución de la Internet de las cosas de la que ya he hablado, no me costaría creer que en poco tiempo se logre. 

Otro aspecto de la vida doméstica que Asimov previó casi correctamente fue el del uso de robots de limpieza. Efectivamente, los existentes son bastante limitados, pero comienzan a popularizarse su uso. Por desgracia aún no pueden hacer todo lo que el viejo sabio pensaba que alcanzarían. También acertó en la existencia de baterías de larga duración, pero los cables todavía no se han ido. No obstante, este año puede ser el del desarrollo comercial de la li-fi, que destierre para siempre los cables. 

Donde sí falló estrepitosamente Asimov fue en el ámbito de la producción de energía. Aunque la tecnología para llevar a cabo lo que él planteó en 1964 existe, aún queda lejos la generalización de la energía solar como fuente de energía. Aunque sí acertó en el desarrollo de los primeros vehículos sin piloto, la antigravedad todavía está lejos de conseguirse. Las pasarelas mecánicas en las calles son todavía ciencia-ficción, aunque ya existan, por ejemplo, en muchos aeropuertos. Otro aspecto en el que Asimov fue demasiado optimista se refiere al alcance de la exploración del espacio. Nada de colonias lunares o marcianas en 2014. Tal vez en no demasiado tiempo, quizá veinte o treinta años, aunque lo mismo pensaban en su época.

Finalmente, Asimov se equivocó de pleno en cuanto a la organización del trabajo y el modelo educativo. El humano de 2014 trabajará, de media, menos horas que en 1964, pero para nada se ha extendido la educación lo suficiente como para que se incluya el estudio de lenguajes de programación en las escuelas secundarias. El uso de ordenadores en el trabajo se ha extendido notablemente, pero su programación permanece como una función propia de un reducido número de profesionales. 

La conclusión a la que me gustaría llegar es que, mientras los dos primeros autores eran bastante pesimistas y algo conservadores en sus previsiones, Asimov, en los exultantes sesenta preveía un futuro mucho más brillante de lo que realmente hemos logrado. Probablemente, Verne y Wells hayan estado más acertados en tanto su propia época se asemeje más al presente de lo que se parecen los años sesenta a la actualidad. Esto es una reflexión meramente intuitiva, así que si opináis de forma diferente, espero vuestros comentarios. ¡Feliz Año 2014!