jueves, 31 de mayo de 2012

Vicepresidenta de la Comisión Europea a favor de la neutralidad de la red



Tenemos muy buenas noticias en torno a un tema que aunque estos días no ocupa las portadas de los medios, colapsados por el caos de la economía. La Vicepresidenta de la Comisión y Comisaria para la Agenda Digital de Europa, Neelie Kroes, ha hecho público su apoyo a la neutralidad de la red en un resumen de prensa (inglés) y en una entrada de su blog oficial, ambos publicados el 29 de mayo. Kroes ya se ha manifestado anteriormente a favor de convertir Europa en un foco para la creación de una "industria digital" en Europa. Sin embargo, esta vez ha dado un paso más: ayer se manifestaba firmemente a favor de una Internet neutral en la que los proveedores de servicios proporcionaran una información clara y veraz sobre los servicios que proporcionan.

De acuerdo con su publicación, basada en el informe emitido por el BEREC, en torno a un 20% y posiblemente hasta la mitad de los contratos de servicio de telefonía móvil incluyen restricciones a servicios como VoIP o P2P. Además, en torno a un 20% de los operadores fijos estarían aplicando restricciones a las conexiones de P2P en horas punta, lo cual afectaría en torno al 95% de los usuarios en un determinado país. No puedo dejar de remarcar la importancia que tiene este fraude: estas limitaciones no están a menudo explicitadas en los contratos, ni en las ofertas comerciales de los proveedores. 

La Comisaria continúa más adelante señalando que propondrá una serie de recomendaciones en torno a tres puntos con el fin de terminar la espera por lograr una neutralidad de la red real en Europa:

1.- Los usuarios deben conocer de forma veraz los servicios que están contratando. No simplemente las velocidades de descarga "a las tres de la madrugada", sino en horas punta y a ser posible indicando la velocidad mínima de descarga que le será ofertada. Sobre este punto, ya he tenido la experiencia personal de contratar un servicio de 20 Mb, y recibir menos de 1 Mb. Lo peor de todo es que al contrastar la información del servicio técnico con la de la tienda en la que contraté el servicio, se producían contradicciones fundamentales: la tienda (una franquicia) estaba siendo engañada por la central sobre las velocidades que estaba ofreciendo realmente. Esto supone un daño no sólo para los consumidores, sino también para el pequeño comercio que actúa como intermediario en el mercado.

2.- Los usuarios deben conocer los límites de los servicios que están contratando. En este punto, la Comisaria se muestra a favor de que los límites se cuantifiquen de forma clara. Si va a haber un tope de volumen de descarga, que este sea claro. De esa forma, los usuarios podrán escoger la oferta que mejor se les adapte. Más adelante añade que no hay porque oponerse a las ofertas de contenido limitado en cuanto a los servicios provistos, si los usuarios lo demandan. Es decir, que si los usuarios se conforman con un Internet limitado a una serie de funcionalidades a cambio de un precio menor, no hay porqué ponerles trabas. Sin embargo, deben ser conscientes de lo que están comprando.

3.- Los usuarios deben saber si están comprando Champagne o "vino aguado". Es decir, si no es Internet ilimitado, no debería comercializarse como tal. De hecho, ni siquiera debería comercializarse quizá con la etiqueta de "servicios de conexión a Internet".

Por último, Kroes hace un llamamiento a la responsabilidad en el respeto a la privacidad debido a la práctica de la "inspección de paquetes". Consiste en la monitorización del tráfico de un usuario. Esta práctica debe ser regulada y su el usuario debe ser consciente de que va a ser sometido a dicha monitorización en el momento de contratar los servicios.

Como reflexión personal, diré que todo lo dicho por la comisaria me parece muy sensato y me alegra que por fin algunos políticos se conciencien de las perniciosas prácticas de las operadoras que lastran la actividad en la red. Sin embargo, echo en falta un toque de atención a los gobiernos en este comunicado. La neutralidad de la red no sólo depende de una regulación europea que espero se apruebe gracias a las futuras recomendaciones de la Comisaria, sino también de las normas nacionales como la Ley Sinde-Wert que suponen una amenaza si cabe mayor para la neutralidad que la actividad empresarial. Esto podría solucionarse con una norma europea que establezca una neutralidad que sea imperativa no solo para los sujetos privados sino que vincule también de forma efectiva a los Estados miembros.

martes, 29 de mayo de 2012

El Quinto Jinete




El domingo escuchaba en la radio el estupendo programa 152 de "SER Historia", dedicado en esa ocasión a la "historia más oscura del dinero", con ocasión del libro "La Troika y los cuarenta ladrones", de Santiago Camacho. Este escritor es también autor de un libro sobre la historia de la mafia, y me pareció muy revelador cómo comparaba a determinados agentes del mercado con las organizaciones mafiosas. Así por ejemplo, las agencias de calificación extorsionan a empresas, entidades financieras y gobiernos para que contraten sus servicios, o bien se "arriesguen" a recibir una calificación considerablemente peor (o una rebaja de la misma, si ya tenía clasificación de antes) que si acepta pagar las sumas millonarias que exigen por dichos servicios. De tal manera que en ocasiones, cuando escuchamos o leemos en los medios sobre la rebaja de calificaciones no necesariamente se debe a un comportamiento financiero o contable dudoso, sino simplemente a no ceder a la extorsión de estas agencias. No es de extrañar que la propuesta del Ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, de crear una agencia de calificación pública europea quedara en el olvido a pesar de contar con el visto bueno de su Canciller, de la Comisión europea y del resto de países de la Unión. Seguramente al día siguiente recibiera una cordial llamada de Moody's, de Standard & Poor's o de alguna otra invitándole a retirar la propuesta o arriesgarse a una bajada de la calificación de la deuda alemana.

Otra práctica similar entre la mafia y los agentes económicos es la contratación de "sicarios económicos". Se trata de sujetos dedicados a corromper funcionarios públicos y políticos mediante el sistema del palo y la zanahoria. Aceptar los sobornos y prebendas les permitirá gozar de un sueldo o jubilación espléndidas en algún consejo de administración o paraíso financiero, y no hacerlo puede comportar ser encausado en procesos judiciales que provoquen su caída en desgracia. Como auténticos gángsters, crean mediante esta combinación de sobornos y amenazas verdaderas tramas mafiosas que permiten a las empresas (o Estados) para las que trabajan el beneficiarse del dinero público de subvenciones y contratos públicos, el apoyo de acciones militares, o el acceso a recursos naturales.
Este programa, unido a las noticias de que Bankia no devolverá el dinero que el gobierno español le ha prestado al convertirlo en capital de la empresa, me lleva a realizar una reflexión acerca de cómo los gobiernos se han convertido en auténticas marionetas. De acuerdo con el autor, no se puede hablar realmente de "una conspiración" en la que exista una mano negra. El problema reside en que hay muchas "manos negras" actuando de forma descoordinada en una lucha por llevarse la mayor cantidad de dinero posible de los Estados.

Mucho me temo que la gran estafa de la crisis esté debilitando los Estados, especialmente los europeos, de forma que nos dirijamos a una singularidad en la que la muerte de la democracia es ya cierta, y sea reemplazada por uno de dos modelos políticos que están comenzando a colisionar.

Por una parte, la centralización de la soberanía en agentes externos a los Estados. Hace poco que nuestro presidente del gobierno aseguraba que había hecho todo lo posible y que la solución estaba en una respuesta de la Unión Europea. Sin entrar en consideración sobre si esto es cierto o no (yo lo pongo en duda), el efecto práctico de ello es avocar la competencia para resolver los problemas de la nación en instituciones no elegidas democráticamente o de forma remota e indirecta. De esta forma, ante la catarsis del desgobierno, surgen una serie de tecnócratas que imponen agendas de gobierno que no tienen en consideración los derechos de los ciudadanos o el respeto a la democracia. Si en los años noventa, la crisis de la democracia fue la transformación del gobernante en gestor, en el siglo XXI está siendo la transformación del gobernante-gestor en mero burócrata. No hace falta más que ver a la composición de nuestro gobierno, en el cual la amplia mayoría de ministros son ex-funcionarios públicos para hacerse una idea de a qué me refiero. La democracia se disuelve en un laberinto escheriano en el que no hay salida, solo una espiral autoritaria.

Por otra, tenemos una suerte de cleptocracia, en la que organizaciones pseudocriminales ostenten el poder a través de la amenaza de quiebra directa o indirecta del país en el que se ubican. De esa forma, una entidad como Bankia, calificada como "sistémica" puede (como ha hecho) apropiarse a mano descubierta de amplísimos fondos del Estado mediante la extorsión con una "opción nuclear": la destrucción del sistema económico del país si no se cumple su voluntad. Perfectamente podría exigir cualquier cambio legislativo, o incluso acabar con el gobierno si este no respondiese a sus amenazas. En el pasado, la amenaza de guerra nuclear mundial, fue llamada "el quinto jinete del apocalipsis" en la (aconsejable) novela de Dominique Lapierre. No fue hasta el momento en que se alcanzó el punto crítico de inflexión llamado oportunamente MAD (acrónimo de "Mutual Assured Destruction", pero también "loco" en inglés) que se produjo una distensión y que el terror nuclear dejara de marcar la agenda política. Actualmente, otro "quinto jinete" ha tomado su lugar: el de la implosión del sistema capitalista tal y como lo conocemos hasta ahora. Sin embargo, si los líderes políticos mundiales quieren dejar de ser ciegos, han de asumir la verdad: el sistema capitalista como lo conocíamos ha muerto. 

jueves, 24 de mayo de 2012

Los Vengadores



Volvemos a hablar de cine en Los Archivos Olvidados. En este caso, pretendo reseñar la última película que he visto en el cine, la esperada película de Los Vengadores. En primer lugar, mi enhorabuena por la elección de Joss Whedon para la dirección, porque creo que la nota de la película hubiera bajado drásticamente con otro director que nos presentara un filme sobrio sobre los superhéroes. Esto no es el Batman de Christopher Nolan, ni tampoco los X-Men de Bryan Singer. Es una película de aventuras, entretenida y para todos los públicos. O casi. Porque la película ha sido clasificada para mayores de 7 años, lo cual me sorprendió antes de verla. Después de verla, tengo mis dudas de que un niño de 8 años pueda entender la película en toda su complejidad, pero sin duda no se aburrirá. 

El argumento es en sí bastante tópico. Loki junta un ejército de malos, engaña a los buenos para que puedan invadir la Tierra, pero los buenos, tras tragarse la testosterona, comienzan a trabajar en equipo, luchan contra los malos y patean el culo de Loki.  

Ciertamente, el argumento es más complejo que esto, pero tampoco voy a revelar más detalles. Eso sí, he llegado a la conclusión de que las únicas películas que uno necesita ver para enterarse de la "metatrama" de esta película son Iron Man 1 y 2, Thor y Capitán América. Hulk os la podéis saltar, porque no hay la más mínima referencia a su película. 

En cuanto a fotografía, la película es vistosa, pero nada que ver con Thor o Capitán América. Quizá la mejor parte sea el encuentro entre Thor y su hermano, que apropiadamente ha sido retratado de forma súmamente gótica. Hasta el punto que Tony Stark se burla de ello. 

Ese es otro punto de la película. Joss Whedon ha dado rienda suelta al humor de Robert Downey Jr., mucho más que en las otras películas, de tal forma que a determinadas personas puede resultarle cargante o ridículo. No es mi caso, como fan de Iron Man y de Robert Downey Jr., creo que hace bien su papel. De hecho, creo que los diálogos cómicos de la película la hacen mucho más llevadera, como ya anticipé. ¿Que Robert Downey Jr. chupa mucha cámara? Es verdad. Pero es el punto más fuerte de la película, así que creo que Joss Whedon ha acertado con ello. 

Quizá los únicos diálogos que no me han gustado han sido los de Viuda Negra. A lo mejor soy el único friki que prestaba atención, pero las dos veces que usa como excusa "tener la cuenta en rojo" decidí que sin duda debió encargarse el becario de Zack Penn (co-guionista de la película junto con el propio Whedon). 

Respecto del vestuario, debo decir que para ser una película de superhéroes, no es un aspecto muy destacable. Algo que sí se podría decir de Thor o Capitán América (también), aquí es algo bastante anodino. Lo mismo pasa con la banda sonora. Prácticamente me ha pasado desapercibida.

Sí destacan los efectos especiales, como es natural. Especialmente cuando los invasores se ponen a destruir alegremente Nueva York cual mongoles en el monopatín de Marty mcFly de Regreso al Futuro. Chistes aparte, hay escenas bastante impresionantes. Aunque agradezco la sensatez de no haber hecho versión en 3D, porque para media hora de película hubiera sido una estafa. 

En cuanto al reparto, me parece que el anabolizado Jeremy Renner no fue la mejor elección para Ojo de Halcón. Por otra parte, me descolocó la elección de Mark Ruffalo para interpretar a Bruce Banner/Hulk. Descartar a Edward Norton fue una mala idea, me gustó su papel en The Incredible Hulk. Los demás, hacen su papel, sin excesiva brillantez pero tampoco sin grandes fallos. Salvo Scarlet Johanson, que pone morritos cuando posa. Los mejores, para mí han sido los dos secundarios de la película: Cobie Smulders (sí, Robin Scherbatsky de How I met your mother) y como siempre, el grandioso Clark Gregg en su papel del Agente Coulson. 

Nota: 7,5. Es una buena y entretenida película, que merece la pena ver en el cine, especialmente por la traca final. La película es divertida y vistosa, aunque bastante peor en cuanto a calidad que Thor, o Batman Begins, por citar otras películas de superhéroes que me hayan gustado en los últimos años. 


jueves, 10 de mayo de 2012

Los Juegos del Hambre



Esta semana toca algo de cine. En concreto, de las últimas dos películas que he visto en la gran pantalla, de las cuales comenzaré hoy por "Los Juegos del Hambre". Esta película es la adaptación al cine de la novela de Suzanne Collins del mismo nombre, la primera de una trilogía. La intención es llevar dicha trilogía al cine.

La película nos muestra un futuro distópico en el cual la civilización de Panem se alza como única potencia continental. Según nos cuentan, El Capitolio (la capital de este imperio) consiguió derrotar a las naciones que se opusieron a él en una rebelión. Tácitamente, nos dan a entender que esto fue una guerra nuclear que arrasó gran parte del planeta. Pese a ello, este se recuperó y El Capitolio subyugó a las otras naciones, anulando su identidad y convirtiéndolas en "distritos". Dichos distritos se dividen las diversas facetas económicas de la producción de los bienes que Capitolio necesita para consumir. Mientras que los habitantes de los Distritos viven en la miseria, los habitantes del Capitolio son extremadamente ricos, extravagantes y vanidosos. Para recordar la "generosidad" de El Capitolio al perdonar la insurrección, una vez al año, dos niños de cada distrito, de entre 12 y 18 años, son seleccionados para luchar a muerte en un "estadio" (una especie de escenario virtual, aunque las muertes son auténticas). 

Con este planteamiento, la película nos presenta a Katnis Everdeen, una adolescente que es además una excelente arquera y cazadora del Distrito 12. Su hermana Primrose entra en el sorteo de la Cosecha (en el cual se seleccionan los jóvenes de cada distrito que pelearán) por primera vez. Está francamente asustada, pero Katnis la intenta consolar. Sin embargo, la mala suerte se ceba con ella y sale elegida. Katnis, en un acto de valentía, se ofrece voluntaria como tributo. Una posibilidad contemplada en las reglas, pero raramente usada en el Distrito 12. El otro elegido es Peeta Mellark, un aprendiz de panadero, con el cual Katnis ha tenido una mala experiencia en el pasado. 

De la miseria a la opulencia, la escena siguiente nos muestra a los dos jóvenes en el tren. Este tren los llevará a El Capitolio, y en él tendrán la oportunidad de conocer a su futuro entrenador, un superviviente de los Juegos del Hambre. Es decir, un hombre procedente de su Distrito que llegó a vencer en el pasado. Sin embargo, Haymitch Abernathy (Woody Harrelson) se presenta en su estado natural: borracho. Lo cual será una pésima impresión del Capitolio. Junto con Effie (Elizabeth Banks) y Cinna (Lenny Kravitz) formarán el equipo del Distrito 12. Los tres prepararán a Peeta y a Katnis para su participación en los juegos, no solo en su faceta de supervivencia, sino también en su faceta más "social". En los Juegos es esencial contar con patrocinadores, ya que estos podrán aportar ayuda durante los mismos. Y eso tiene mucho de concurso de popularidad al más puro estilo "Gran Hermano". La primera parte de la película trata de esto. La segunda mitad retrata cómo se las apañan Katnis (y Peeta, colateralmente), durante los Juegos, luchando contra los otros competidores, pero también contra el propio Capitolio y las trampas que éste le tiende.

Pasando más al análisis de la película, diré que el guión es bueno, pero siendo una adaptación, hay algunas cosas que se han dejado fuera y que pueden dificultar la comprensión de la película para el profano que no haya leído los libros. No obstante, el argumento principal queda claro, solo se pierde en los detalles, como qué es el Sinsajo. O, por ejemplo, cuál es el significado de alzar tres dedos juntos de la mano para los habitantes de los distritos.

En cuanto a la fotografía, está realmente bien cuidada. Las imágenes de El Capitolio, los parajes naturales en los que se desenvuelve la película, los talleres y casas de los distritos... Todo ello destila la esencia de lo que lo representa cada uno: opulencia monumental, desafiante salvajismo y miserable ruina.

El vestuario es lo más destacable de la película. Me encanta el contraste entre las sencillas ropas de los habitantes de los distritos, que claramente imitan las de los trabajadores de la América profunda de los años 30, con el de los habitantes de El Capitolio, tan extravagantes y alocados. En parte, un recuerdo de aquella época, pero también un reflejo oscuro de nuestro propio mundo actual. 

Finalmente, en cuanto a la dirección, hay algunos detalles que no me han gustado excesivamente. Las escenas más violentas transcurren a velocidad muy rápida "para rebajarlas", y así que la calificación de la película no sea para mayores de 18. Que es quizá la que le correspondería de ser fiel a la novela. Por otra parte, sorprende un poco cómo de rápido se adaptan Katnis y Peeta a una tecnología que nunca han tenido en sus manos. Cierto, que son jóvenes y eso siempre ayuda. Pero contrasta mucho con la inadaptación de Haymitch. Otro detalle más que me pareció extraño es el siguiente. Al principio de la película, cuando seleccionan a Prim para representar al Distrito 12, Katnis se presenta voluntaria. Entonces, Effie pide la opinión del alcalde. Sin embargo, no vemos ni oímos a este personaje. Todo parece indicar que esta escena se cortó, por alguna razón. No haber encontrado un sustituto para este personaje o haberlo "camuflado" de forma que este detalle sea menos evidente es un pequeño fallo de dirección, pero no se lo tendremos demasiado en cuenta.

Nota: 7,5. Es una buena película, entretenida, ácida y muy bien cuidada en cuanto al vestuario y la fotografía. Por lo que me han comentado los lectores del libro, es además muy fiel a la novela, aunque se echa de menos algunos detalles que ubiquen un poco mejor al espectador en la trama. No puede decirse que el guión sea muy sorprendente y realmente no se ven grandes giros de trama. Con todo, es una película que merece la pena ver y que recomiendo a todo el mundo.

Curiosidades:
-Suzanne Collins (la autora del libro) colaboró en el guión. Y se agradece.
-Jennifer Lawrence (Katniss) es rubia natural, mientras que Josh Hutcherson (Peeta) tiene el pelo negro. Ambos tuvieron que teñirse para la película.
-Es la primera vez que Lenny Kravitz participa en una película como actor. Y lo hace sorprendentemente bien.
-Durante el rodaje, Josh Hutcherson apostó a Jennifer Lawrence que no sería capaz de darle una patada pasando la pierna por encima de la cabeza. Jennifer le dio una patada en la sien y dejó inconsciente a Hutcherson durante varios minutos. Y luego ganó la apuesta. Aunque sospecho que al bueno de Josh no le quedarán ganas de apostar nada a su compañera en futuros rodajes.
-Las escenas de El Capitolio requirieron la adquisición de nada menos que 300 pelucas.
-La escena de La Cornucopia cuenta con un tema de música electrónica bastante friki compuesto en 1972 por Laurie Spiegel con un sintetizador analógico. El sintetizador usaba tanta energía que la compositora necesitaba desconectar su nevera para usarlo. Aquí podéis escuchar la pieza (que no aparece en la banda sonora).
-En la película se le ha dado mayor protagonismo a Seneca Crane que en el libro. Lo cual creo que ha sido un acierto, porque me parece un personaje bastante interesante.





miércoles, 2 de mayo de 2012

El proyecto de ley CISPA comienza su recorrido



El viernes teníamos una mala noticia. Tal y como era de esperar, la cámara baja del Parlamento americano, la Casa de Representantes aprobaba ese día el proyecto de ley CISPA (Cyber Intelligence Sharing Act). La ley CISPA es quizá la más severa de las iniciativas legislativas para poner Internet bajo la vigilancia y control de las agencias de seguridad de los EEUU. 

¿Qué es CISPA?

Oficialmente se trata de una enmienda a la Ley de Seguridad Nacional de 1947, la misma que creó la CIA y reformó profundamente el FBI. La razón para llevar a cabo esta reforma es la regulación de la "ciberseguridad" en dichas agencias, así como en otras que han aparecido posteriormente. La ley permite un intercambio más fácil (por ser obligatorio) entre dichas agencias, las fuerzas armadas y los sujetos privados (empresas, fundamentalmente). Al contrario que otros proyectos de ley, este viene de la mano de políticos de ambos partidos: en concreto Mike Rogers (republicano) y Dutch Ruppelsberger (demócrata). De acuerdo con esta ley, dichos sujetos privados estarían obligados a ceder información privada de sus clientes a las agencias de seguridad estadounidenses, sin el consentimiento o el conocimiento de esas personas, y sin pasar por trámite judicial. Además, el proyecto de ley prevé que dichos datos pasarán a ser propiedad del gobierno de los EEUU, el cual podrá realizar con dicha información lo que crea necesario, también comercializarla. El proyecto de ley autoriza también a dichas agencias a intervenir, detener y modificar el contenido de las comunicaciones entre sujetos privados. Además, la definición de "ciberamenaza" es deliberadamente amplia, por lo que cualquier vulneración de las leyes americanas, como puede ser el copyright, podría ser motivo de investigación e intervención. 

¿Qué es lo que sigue a continuación?

A pesar de lo que podáis leer en Internet la ley aún no está "aprobada", sino "en trámite parlamentario". Ha superado el primer trámite, pero debe ser todavía aprobada por el Senado, y firmada por el Presidente, el cual puede decidir imponer o no un veto sobre la misma. 

En la Casa de Representantes la ley fue aprobada por un 57%  de representantes, rechazada por un 38% y con un 0,03% de abstenciones. Aplicado al Senado, eso supondría su aprobación: bastaría la unanimidad de los republicanos, los 2 independientes y 8 senadores demócratas para su aprobación. Sin embargo, afortunadamente, la unanimidad entre los republicanos no es total. 28 representantes republicanos votaron en contra en la Cámara de Representantes. Si ese voto negativo se transmitiera al Senado, tendríamos un 88% de votos republicanos y un 21,87% de demócratas a favor. Eso supondría en el Senado un total de 41 votos republicanos y 12 demócratas. Con un total de 63 votos a favor, sería más que suficiente para aprobar la ley. Los datos para estos cálculos los he extraído del excelente cuadro-resumen de New York Times sobre el voto.

¿Quienes la apoyan?

Al contrario que en otras ocasiones, esta vez las grandes empresas del sector están a favor de la ley. Demoledor ha sido para los ciberactivistas el anuncio del apoyo de Facebook a esta iniciativa, como explican aquí. Google no se ha pronunciado aún, pero han manifestado en repetidas ocasiones que "cumplirán con la ley". Ya lo hicieron con la censura China. Esto es totalmente comprensible para una empresa.

Lo grave son las donaciones que muchas empresas privadas han hecho en favor de la ley. De hecho, OpenSecrets.org señala que al menos 12 firmas habrían pagado más 100.000 $ a Mike Rogers para que proponga el proyecto de ley. Aquí podéis encontrar la lista completa. De acuerdo con las estadísticas, el Senado vota a favor de las propuestas apoyadas con dinero por contribuyentes privados un 73% de las veces.

¿Qué hacer?

En este caso, soy bastante menos optimista que con SOPA. Entonces había una gran oposición a la ley, cosa que no ocurre en este caso. Sin embargo, hay una persona con capacidad de detener la ley y que ha mostrado su rechazo a la misma: Barack Obama. El Presidente de los EE.UU. tiene capacidad de veto y ha amenazado con utilizarlo si CISPA se aprueba. Lo cierto es que Obama se enfrenta en unos meses a unas elecciones que tiene casi ganadas de antemano, pero para las cuales todavía tiene que hacer campaña. La parte buena es que necesita los votos para legitimar y consolidar su proyecto político. La mala es que necesita el dinero para la campaña y ese dinero lo aportan contribuyentes privados. ¿Cómo resolver ambos inconvenientes? Bien, sería buena idea una campaña con un lema tal que "Donaré 1$ a la campaña de Barack Obama si veta CISPA". Con suficientes apoyos, Obama consigue el dinero Y los votos. Y los internautas nos libramos de CISPA. It's win-win!

Por lo demás, los habituales mecanismos de presión siguen vigentes. El hecho de que un 73% de las veces los senadores apoyen "a quien tiene el dinero" no significa que se deba renunciar a la posibilidad de luchar para que esta sea parte de ese 27% de ocasiones en que la razón se impone al capital.


VIDA EXTRA: Durante la discusión de la ley, se aprobaron un par de enmiendas, referidas a qué información no puede el gobierno, las fuerzas armadas o las agencias de seguridad requerir de los sujetos privados. Se trata... tachán tachán de la religión y del registro de armas. Es decir, que puedo ser un fanático musulmán y tener cuarenta fusiles en casa y no pasa nada, la ley me ampara. Sin embargo, si el gobierno americano exige las fotos de mis vacaciones a Facebook, se las tendrán que entregar en bandeja. Sí, señor, muy efectiva contra el terrorismo esta ley...